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Mi perro tiene un ojo más grande de lo normal.

Mi perro tiene un ojo aumentado de tamaño.

Mi perro tiene un ojo más grande de lo normal. El aumento de tamaño de uno o ambos ojos en un perro puede deberse a varios motivos y entre ellos destaca el glaucoma, grave enfermedad que puede llevar muy rápido a la ceguera del ojo afectado.

Mi perro tiene un ojo más grande de lo normal. En muchas ocasiones nuestros perros tienen un aumento de tamaño del globo ocular junto a un enrojecimiento de los ojos. Solemos pensar que se trata de una conjuntivitis por una irritación o una alergia, y eso sería lo más habitual si solo hubiese un enrojecimiento. El problema es que el enrojecimiento ocular también aparece en otros trastornos, como es el caso del glaucoma, y estos pueden ser tan serios que lleven a la pérdida irreversible de visión del ojo afectado en muy poco tiempo.

Podemos definir el glaucoma como un aumento de la presión intraocular acompañado de una disminución o pérdida de la función visual del ojo afectado. Ese aumento de presión va a dañar a las células de la retina y del nervio óptico provocando su muerte y con ello la pérdida de visión del ojo afectado.

Debido a que ese aumento de presión ocular puede ser muy rápido, el daño que provoca también es muy rápido, lo que conlleva la pérdida de visión del ojo afectado si no se trata con suma urgencia.

El glaucoma puede ser de tipo congénito, en el que ciertos perros nacen predispuestos a padecerlo debido a alteraciones en el sistema de producción y drenaje del humor acuoso. También puede ser adquirido, es decir, ser consecuencia de algún otro problema que cause alteración en el drenaje del humor acuoso. Así podemos citar problemas como son la uveitis, hemorragias oculares, desplazamiento del cristalino, neoplasias, traumatismos, etc.

Según sea su forma de presentación puede ser agudo, es decir, que aparece de forma repentina y que lleva rápidamente a la ceguera si no se trata con urgencia. También puede presentarse de una forma más crónica, en la que el aumento de presión intraocular se va produciendo poco a poco y es en esos casos cuando el cuidador tarda más tiempo en darse cuenta de que hay un problema, pero también lleva a la pérdida de visión.

Cuando un perro padece un glaucoma podemos apreciar la presencia de enrojecimiento ocular (lo que solemos confundir con una conjuntivitis), edema corneal (que solemos confundir con una queratitis), aumento del tamaño del globo ocular (buftalmia), dolor (que se manifiesta por que nuestro perro come menos o no quiere comer, está decaído, puede vocalizar, se rasca la zona, etc.). Junto a esto y otros síntomas oculares ( luxación del cristalino, estriaciones en la córnea, pupila dilatada  y fija, vasos episclerales congestionados, etc.), también notaremos que nuestro perro ve menos o no ve con el ojo o los ojos afectados.

Para el mejor control y pronóstico de esta enfermedad es preciso realizar un rápido diagnóstico del problema, lo que requiere un examen completo de los ojos y un examen general del perro. Se requiere hacer una analítica de sangre, examen ocular con oftalmoscopia, lámpara de hendidura, tonometría,  gonioscopía,  ecografía y electrorretinografía. Con todo esto se llega a diagnosticar si hay glaucoma, de qué tipo es y, si es posible, la causa del mismo.

Cuando se llegue al diagnóstico de un glaucoma habrá que instaurar tratamiento. En muchas ocasiones, sobre todo en el caso de glaucomas de presentación aguda, se requiere hospitalización para instaurar un tratamiento de urgencia con vistas a disminuir rápidamente la presión intraocular y luego se puede seguir con un tratamiento ambulatorio y controles con la periodicidad que recomiende el oftalmólogo. En otras ocasiones el tratamiento será quirúrgico, utilizando las técnicas más apropiadas para cada caso y luego seguir con tratamiento médico y revisiones.

Recordad que cualquier lesión del ojo siempre debe tratarse como una urgencia pues, aunque parezca algo leve, puede tratarse de un grave problema que ponga en peligro la visión y/o la integridad del ojo afectado. Por ello es aconsejable que si notamos algún problema en los ojos de nuestros perros no esperemos a ver cómo evoluciona sino que no perdamos tiempo y acudamos a nuestro veterinario para que examine los ojos, diagnostique e instaure el tratamiento oportuno.

Aprovechamos para recordaros que en la Clínica Veterinaria OLIVARES (Granada) ponemos a vuestra disposición nuestro Servicio de Urgencias 24 horas, así como el teléfono de consulta que aparece en nuestra página (tuveterinario.info), también operativo las 24 horas para que podáis solucionar todas las dudas que os surjan sobre este o cualquier otro tema relacionado con la salud y cuidados de vuestros animales.

Manuel Olivares Martín, veterinario de la Clínica Veterinaria OLIVARES (Granada) y de tuveterinario.info

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