Nuestro perros saben nadar por instinto por lo que si se caen a una piscina, estanque o alberca no debería haber problema SIEMPRE que haya algún sitio por donde puedan salir. Con esto quiero decir que si tenemos perro en sitios con piscina, debemos ver que tengan escaleras de obra para que nuestros perros puedan salir si se caen. Si no es así y las escalerillas son las típicas de metal, debemos fijarnos que el nivel del agua sea lo suficientemente alto como para que nuestros perros puedan acceder a ella.
Si existe riesgo de que nuestro perro no pueda salir de la piscina si se cae, debemos evitar que pueda acercarse a ella sin vigilancia ( lo mejor sería tener una valla que impidiera el acceso a la piscina).
Siempre que bañemos a nuestros perros en la piscina, debemos luego enjuagarlos con agua del grifo para arrastrar el cloro que lleva el agua de la piscina y que pudiera ser irritante para la piel.
También debemos evitar el acceso de nuestros animales a las zonas donde se echa el cloro a la piscina para evitar el contacto con los vapores irritantes que puedan desprender. Igualmente debe impedirse el acceso a los sitios donde se guardan los productos de limpieza y desinfección de la piscina pues el cloro, el aguafuerte, los antialgas, etc. son altamente tóxicos para nuestros animales.
Otro cuidado que debemos tener, tanto nuestros perros como nosotros, es con las picaduras de avispa, tan abundantes en las piscinas. Si la picadura es en la piel, suele ser difícil de localizar el sitio pero podemos lavar la zona con vinagre diluido. Si es en la boca ( a veces nuestros perros intentan comerse a las avispas), lo mejor sería contactar con nuestro veterinario pues puede aparecer una gran inflamación que dificulte el paso de aire. Si la picadura es de abeja, con una lupa y unas pinzas debemos extraer el aguijón, si aún sigue clavado (con mucho cuidado de no presionar más la bolsa que contiene el veneno para no inyectar más cantidad) y lavar con bicarbonato. Además se pueden poner paños con hielo en su interior para controlar la inflamación y el dolor. A veces se pueden utilizar antiinflamatorios y analgésicos orales para ayudar a controlar la inflamación y el dolor en los perros y gatos. En el caso de los animales hipersensibles a estas picaduras, tanto de avispa como de abeja, las reacciones pueden ser muy graves para la vida de nuestros animales y debemos contactar con el servicio de urgencias veterinarias pues nuestros animales requerirán atención inmediata ( puede tener que recurrirse a inyectar adrenalina, corticoides, antihistamínicos según la gravedad del proceso).
Nosotros, en la Clínica Veterinaria OLIVARES, en Granada, tenemos a vuestra disposición el servicio de urgencias y el servicio de consulta telefónica las veinticuatro horas del día para atender este tipo de problemas y todas las dudas que os puedan surgir al respecto.
Visto esto sólo nos queda disfrutar con nuestros amigos de un buen chapuzón para refrescarnos en estos días de tórrido verano.
Manuel Olivares, veterinario de la Clínica Veterinaria OLIVARES y de tuveterinario.info