Las intoxicaciones en nuestros gatos (IV). Otros medicamentos.

En el capítulo anterior comentamos las intoxicaciones en los gatos debidas a los antiinflamatorios, antitérmicos y analgésicos y hoy vamos a comentar las producidas por otros medicamentos que se pueden encontrar en el hogar.

Entre otros medicamentos que pueden encontrarse fácilmente en casa tenemos los antibióticos. Hay muchos tipos de antibióticos que utilizamos para tratar procesos infecciosos, tanto en nosotros como en nuestros animales. Las intoxicaciones, por tanto, se pueden deber a que nuestro gato coja algún medicamento y lo ingiera o que nosotros utilicemos en nuestro gato un medicamento de humana  siguiendo la pauta de la cuenta de la vieja: » como mi gato es pequeño le doy una chispita», que a veces es demasiado. Por último, también puede tratarse de un error y que le demos a nuestro gato un medicamento específico para él pero que equivoquemos la dosis.

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Normalmente la sobredosificación o el uso de antibióticos no destinados a nuestros gatos no suelen producir procesos graves salvo casos muy concretos. Suelen tratarse de cuadros de tipo gastroentérico, con vómitos y diarreas. Algunos antibióticos, como alguna cefalosporina, gentamicina, pueden ser tóxicos para el riñón y sí son muy peligrosos. Otros como las tetraciclinas pueden originar problemas renales, coloración anómala de los dientes y problemas en los huesos.

Otros medicamentos que también tenemos habitualmente  en casa son los ansiolíticos, tan utilizados hoy en día y que también pueden ocasionar la intoxicación de nuestros gatos, tanto porque en un descuido ingieran algún o algunos comprimidos, como también debido a que los propietarios los pueden utilizar cuando, por ejemplo, van a viajar, va a venir gente extraña a casa, o que nuestro gato o esté en celo o haya alguna hembra en celo que él pueda ver u oir. Volvemos a lo de siempre y pensamos que nuestro gato es como un niño y entonces le damos una mijita de comprimido ( que, a veces, resulta ser un cuarto, medio o un comprimido entero de, por ejemplo, Valium 10).

Normalmente nos vamos a encontrar con que el gato se muestra apático, con las pupilas dilatadas (midriasis), hay debilidad muscular y en casos muy graves se puede originar un estado comatoso. En algunas ocasiones nos encontramos con un cuadro completamente opuesto y el gato muestra un cuadro de excitación, incluso con agresividad.

Por último, en este artículo de las intoxicaciones por otros medicamentos, vamos a tratar las debidas a los anticonceptivos, los cuales, debidos a la presencia de elevadas cantidades de estrógenos, van a inducir un cuadro anémico de carácter muy grave. Los estrógenos van a ocasionar una falta de producción de glóbulos rojos que puede resultar fatal para la vida de nuestro gato. Como esto es algo que se produce a medio plazo, la mayoría de las veces el dueño no relaciona el proceso con una intoxicación por ingestión de esos medicamentos y olvida decirlo al veterinario cuando lleva al gato a la consulta. Son intoxicaciones muy poco frecuentes pero muy graves si se presentan.

Recordad que es muy importante el contactar lo antes posible con el veterinario ante la sospecha o comprobación de que nuestro gato haya podido ingerir algún medicamento de estos, sobre todo si no conocemos qué cantidad. En nuestra clínica, en Granada, tenemos siempre a disposición un servicio de urgencias las veinticuatro horas del día para informar sobre qué hacer cuando hay un posible caso de intoxicación y qué medidas tomar mientras se lleva al gato a la consulta.

Manuel Olivares, veterinario de la Clínica Veterinaria OLIVARES y de tuveterinario.info/tuveterinario