Mi perro se ha quedado ciego. Al igual que comentábamos en el caso de los gatos, la ceguera súbita puede tener diversas causas, algo importante en relación al pronóstico.
Mi perro se ha quedado ciego. Ya comentábamos en el caso de los gatos que las causas de ceguera repentina son variadas y es muy importante llegar al diagnóstico del proceso y conocer su causa pues de ello depende el pronóstico que podamos obtener para la recuperación de la visión en nuestro animal.
El comportamiento de los perros y la forma que tenemos de interactuar con ellos es muy distinta al caso de los gatos. Es por esto que solemos darnos cuenta antes de que existe un problema en la visión de nuestros perros pues jugamos más con ellos, los sacamos de paseo a la calle y así es más fácil apreciar la presencia de estos trastornos.
La ceguera puede presentarse de forma más o menos repentina o, al menos, así lo apreciamos nosotros. Puede ocurrir que nuestro perro lleve un tiempo perdiendo visión pero, como aún conserva parte de lla, no apreciemos nada en ese momento hasta que la pérdida ya es bastante significativa o completa.
Causas de pérdida de visión hay muchas y entre ellas podemos citar las traumáticas ( golpes, disparos, etc.); tóxicas; causas inflamatorias; causas infecciosas y parasitarias; problemas metabólicos y endocrinos; problemas circulatorios; etc.
Como vemos son muchas las causas de ceguera. A veces es más fácil detectar un problema ocular que puede llevar a ceguera como es el caso de traumatismos, presencia de cataratas, aumento del tamaño ocular (buftalmos) como en los casos de glaucoma, etc.
Otras veces no se aprecia nada externamente y sólo notamos que nuestro perro ha perdido visión pues está desorientado, choca con objetos, está reticente a salir, etc. Al igual que pasaba en los gatos, es frecuente que los propietarios nos comenten que notan que los ojos de su perro brillan más. Esto se debe a que en ciertos casos de ceguera se produce midriasis ( dilatación de la pupila) y entonces se aprecia con más claridad el reflejo de la luz en el fondo ocular.
Cuando notemos algo extraño en los ojos de nuestros perros debemos acudir con prontitud a nuestro veterinario de confianza. Recordad que hay enfermedades muy serias que pueden llevar a la ceguera permanente de forma muy rápida y se podría evitar con una asistencia temprana.
Decíamos que hay muchas causas de ceguera en nuestros peros. Unas radican en la córnea ( queratitis severas en sus diversas manifestaciones y orígenes, etc.); otras en cristalino ( cataratas diabéticas por ejemplo); en iris ( ciertas neoplasias, etc.); en capas más profundas del ojo, como por ejemplo un desprendimiento de retina; a nivel del nervio óptico, etc.
Debemos tener siempre en cuenta que existen enfermedades sistémicas que tienen repercusión en los ojos y, por tanto, en la visión de nuestros animales. Así, el caso por ejemplo de una hipertensión arterial puede originar un desprendimiento de retina (afección del ojo) pero el origen del problema no está en el ojo como tal.
Cuando se lleva a nuestro perro con problemas de visión a la consulta, el veterinario realizará un examen general del animal para ver cómo se encuentra su estado de salud y luego se procede al estudio de los ojos y de su capacidad visual. Se procede a valorar reflejos como el de amenaza, el parpadeo, el seguimiento de objetos, la respuesta a la luz directa, valoración de la presión ocular, producción lacrimal, estudio oftalmoscópico, ecografía, retinografía, electroretinografía, resonancia, tomografía, etc. Según los casos se requerirá realizar las pruebas diagnósticas que precise el veterinario para llegar al diagnóstico del problema.
Junto a los estudios de los ojos ya hemos comentado que se hace un examen general de nuestro animal y es preciso realizar para ello pruebas complementarias tales como radiografías, electrocardiograma, ecocardiografía, analíticas de sangre y orina, etc. en busca de la causa original del problema.
Una vez que se llega al diagnóstico del problema y de su causa se procederá a instaurar el pertinente tratamiento tanto para la causa ( pongamos por ejemplo el tratamiento de una hipertensión arterial debida a enfermedad cardiaca o renal. Habrá que tratar ese corazón o ese riñón, tratar la hipertensión y poner tratamiento para el desprendimiento de retina que produce).
El tratamiento de la ceguera en el perro dependerá de su causa y de si la lesión producida en los ojos o la afectación neurológica es reversible. Se instaurará tratamiento médico y, en determinados casos, quirúrgico, siempre y cuando existan posibilidades reales de poder conservar la poca visión que mantenga nuestro perro o conseguir solucionar el problema. Si por ejemplo operamos un perro de cataratas y hay lesión a nivel del nervio óptico o de la retina y no son funcionales, por mucho que se extraigan las cataratas nuestro perro va a seguir ciego. Es por esto por lo que aconsejamos que SIEMPRE que se planteee una cirugía ocular se haga un estudio completo del ojo para ver si la función visual se mantiene.
Los estudios más habituales se suelen realizar en la clínica normal pero los más especializados requieren el uso de aparatos y medios más avanzados y sólo se realizan por veterinarios especializados en oftalmología en centros de referencia.
Más información sobre este tema.
Os recordamos que en la Clínica Veterinaria OLIVARES (Granada) ponemos a vuestra disposición nuestro Servicio de Urgencias 24 horas así como el teléfono de consulta que aparece en nuestra página (tuveterinario.info), operativo también las 24 horas para poder solucionar todas vuestras dudas sobre este o cualquier otro tema relacionado con la salud y cuidados de vuestros animales.