Mi perro tiene diabetes.

Mi perro tiene diabetes.

Mi perro tiene diabetes. Esta enfermedad, tan corriente en los seres humanos, también afecta a nuestros perros y es muy importante el diagnóstico temprano.

Mi perro tiene diabetes. Imagino que la mayoría de vosotros habréis oído hablar de la diabetes en las personas e, incluso, es muy posible que conozcáis a alguien que la padece. En el caso de nuestros perros es también una enfermedad que se presenta con relativa frecuencia y que debemos diagnosticar lo más pronto posible para controlarla cuanto antes.

Podríamos definir la diabetes mellitus como una afección que se caracteriza por la presencia de niveles elevados de glucosa en la sangre (hiperglucemia) debidos a una deficiente producción de insulina o por la resistencia a la misma.

La diabetes mellitus canina es una enfermedad endocrina que puede tener diversas causas: por un lado tenemos que puede deberse a una enfermedad de tipo autoinmune que origina la destrucción de un tipo específico de células del páncreas, las células Beta, que son las que producen la insulina.

En otras ocasiones lo que se produce no es un daño inmunitario a esas células sino que se produce una abiotrofia (que es una degeneración o pérdida de funcionalidad) de esas células, o una aplasia (desarrollo incompleto o defectuoso) de las mismas.

En otras ocasiones nos encontramos con la posibilidad de que haya una destrucción del tejido del páncreas tal y como puede ocurrir en casos de pancreatitis, procesos neoplásicos pancreáticos, etc.

Por último, también podemos citar como causas de la diabetes la presencia de insulinorresistencia ( se produce y libera insulina pero no puede ejercer su misión) debido a distintos motivos.

¿Cómo podemos saber si nuestro perro tiene diabetes mellitus? En muchas ocasiones vienen propietarios de perros a la clínica para consultarnos debido a que notan que sus perros orinan en mayor cantidad de lo que era normal. Efectivamente este es uno de los síntomas principales de la diabetes mellitus pero, cuidado, pues hay más enfermedades que producen el mismo síntoma (poliuria) como por ejemplo son la diabetes insípida, hiperadrenocorticismo, enfermedad hepática, enfermedad renal, potomanía, hipercalcemia, hipoadrenocorticismo y alguna más.

En el caso de la diabetes mellitus nuestro perro orina más y bebe más debido a esa elevada concentración de glucosa que hay en la sangre y que, a partir de ciertos niveles, también pasa a la orina. En estos casos en los que el perro bebe y orina más de lo normal hay una característica de la orina que nos puede orientar mucho en la presencia de este proble y es que esa orina, cuando empieza a secarse, es pegajosa, como caramelo y cuando se seca es como si se cristalizara ( esto es más fácil de detectar en perros que se orinan en el interior de la casa).

Más síntomas de que nuestro perro pueda estar afectado de esta enfermedad es el que tiene mucho apetito y come mucho a pesar de que cada vez se ve más delgado ya que no hay un uso eficiente de esa energía que se toma con el alimento.

Otro síntoma que también es característico de esta enfermedad es la aparición de cataratas bilaterales ( en ambos ojos), que, al evolucionar, llevarán a la ceguera del perro. De aquí es de donde viene eso de no dar azúcar a los perros porque se quedan ciegos. No es que al darles azúcar se queden ciegos sino que si el perro es diabético va a desarrollar esta patología.

En casos en los que la diabetes se complica y hay un cuadro de cetoacidosis, veremos que nuestro perro está apagado, sin ganas de comer, con vómitos, olor del aliento como a fruta, dolor abdominal, deshidratación y todo esto puede llevar a una situación de coma y de muerte de nuestro perro si no se instaura tratamiento de urgencia en la clínica.

Con el tiempo la diabetes también va a ser causa de que aparezcan infecciones urinarias recurrentes, problemas circulatorios y neurológicos y es por eso que cuanto antes se llegue al diagnóstico de la enfermedad, más fácil será controlar la aparición de estas complicaciones.

El diagnóstico de esta enfermedad se va a hacer en la clínica. Primero se hará un examen general de nuestro perro y después se procede con las pruebas diagnósticas pertinentes para descartar otros diagnósticos ( analíticas de sangre, orina y pruebas de diagnóstico por imagen).

Cuando se llega al diagnóstico de una diabetes mellitus hay que plantear el tratamiento. En el caso de los perros la mayoría de ellos requiere la utilización de insulina para el control de la enfermedad. La diabetes no se cura sino que se trata de una enfermedad crónica que requiere bastante atención por parte del propietario y del veterinario ( inyección de insulina una o dos veces al día, controles periódicos de la glucemia, revisiones oftalmológicas, analíticas de sangre y orina, etc.).

Junto al tratamiento con insulina se instaura también un tratamiento dietético con una alimentación que también ayuda al control de la glucemia y también se debe tener un control sobre el peso de nuestro perro pues se sabe que la obesidad facilita la insulinorresistencia. En el caso de hembras enteras ( no esterilizadas) se recomienda su esterilización pues los ciclos estrales descompensan el control de la diabetes.

Aprovechamos para recordaros que en la Clínica Veterinaria OLIVARES (Granada) ponemos a vuestra disposición nuestro Servicio de Urgencias 24 horas, así como el teléfono de consulta que aparece en nuestra página (tuveterinario.info), también operativo las 24 horas para que podáis solucionar todas las dudas que os surjan sobre este o cualquier otro tema relacionado con la salud y cuidados de vuestros animales.

Manuel Olivares Martín, veterinario de la Clínica Veterinaria OLIVARES (Granada) y de tuveterinario.info